¿Quiénes somos?
Somos una organización feminista peruana que lucha contra la discriminación y violación de derechos humanos. Buscamos un Estado laico e igualdad sin importar religiones o convicciones.
En la práctica política, nos mantiene en una vigilancia constante para que no exista discriminación alguna en contra de las personas en el ejercicio de sus derechos, especialmente los sexuales y reproductivos, independientemente de su sexo, origen étnico, capacidades físicas, orientación sexual entre otros.
Proponemos la transformación de las relaciones íntimas, económicas, sociales y políticas. Tenemos la convicción de que solo la intervención integral puede generar cambios que trasciendan lo formal y repercutan en la vivencia de las personas. Por ello, en cada una de nuestras acciones trabajamos de manera exhaustiva e interdisciplinaria.
Nuestro equipo profesional cuenta con abogadas, psicólogas, sociólogas, trabajadoras sociales y comunicadoras sociales.
Nuestra visión
Trabajamos para promover una sociedad peruana justa e igualitaria, donde el Estado promueve y garantiza los derechos humanos, la igualdad de género y el respeto a la soberanía de los cuerpos y territorios.
Buscamos construir una sociedad libre de violencias como el patriarcado, el machismo, el racismo y los fundamentalismos, y resistir a la mercantilización de las relaciones humanas. Con una mirada crítica y activa, luchamos por un Perú demócrata y con memoria que defienda los derechos humanos de las mujeres.
Nuestra misión
Somos una organización feminista democrática, comprometidos con la lucha por los derechos humanos y la igualdad de género, con un enfoque intercultural e interseccional.
Nos involucramos en un diálogo estrecho con los movimientos LGBTIQ+ y sociales, trabajando para garantizar el reconocimiento y la protección de los derechos humanos de las mujeres y personas que se identifican como tal, en su diversidad, especialmente de jóvenes, niñas, indígenas, afroperuanas, lesbianas y trans.
Cuestionamos el sistema cultural hegemónico que oprime y mercantiliza cuerpos, sexualidades y territorios, proponiendo y luchando por una política sexual feminista dentro de un Estado laico.