PERÚ, ABRE LOS OJOS: Juntas por nuestros derechos contra la corrupción y violencia

Nos convocamos mujeres y diversidades feministas para juntes EXIGIR, ARTICULAR Y ACCIONAR reafirmando nuestro compromiso con nuestras luchas, que hoy se ven amenazadas por una arremetida capitalista patriarcal, colonial conservadora y fascista que pretende mantenernos como ciudadanas subalternas y personas oprimidas por la trenza de la dominación clase, etnia y género.

Sabemos que en momentos de crisis política, como los actuales, nuestros derechos son postergados y peligran, es por ello que exigimos se garanticen nuestros derechos humanos y fundamentales, y se luche contra las múltiples discriminaciones y violencias que sufrimos, como parte de este sistema patriarcal, capitalista, extractivista, racista, y homolesbobitransfóbico que nos oprime y empobrece cada día más.

Estamos aquí por nuestras muertas, desaparecidas y asesinadas, por las víctimas de violencia y explotación sexual, por las madres víctimas de violencia de género que luchan por la tenencia de sus hijxs, por las víctimas de la violencia de Estado durante el conflicto armado interno tales como las víctimas de violación sexual y esterilizaciones forzadas que llevan años exigiendo justicia, por las defensoras de cuerpos y territorios cuyas vidas peligran, por las niñas y mujeres obligadas a ser madres, por las infancias víctimas de violencia, por las lesbianas y trans víctimas de discriminación y crímenes de odio, por todas y todes que exigen justicia.

Exigimos al Gobierno, al Congreso de la República y al Poder Judicial, cumplan con garantizar que vivamos con dignidad y nos desarrollemos en paz. Nosotras queremos una democracia que condene la corrupción y la destierre de las instituciones que deben garantizar y proteger nuestros derechos.

Repudiamos la corrupción enquistada que vulnera nuestro derecho al acceso de justicia libre de discriminación, en especial por las miles de mujeres indígenas, pobres y analfabetas, que fueron esterilizadas forzadamente durante el gobierno fujimorista y que aún buscan justicia desde hace más de 25 años, como Mamérita Mestanza y Celia Ramos. Así como por las mujeres de Manta, víctimas de violencia sexual por militares durante el conflicto armado interno. Por casos como el asesinato de la periodista Melissa Alfaro que después de 31 años se ha logrado la apertura del juicio e investigación por verdad, justicia y reparación.

Foto: Igor Alfaro Méndez

Nos pronunciamos contra la corrupción que permite que los jueces otorguen penas mínimas a los feminicidas, como es el caso de Sheyla Torres Aguilar que fue asesinada a los 19 años y a pesar de la crueldad del feminicida, el Poder Judicial lo condenó a 15 años de cárcel, cuando la pena es 25 años.

Por nuestra compañera Solsiret Rodríguez Aybar; han pasado más de 6 años desde su asesinato y hoy sus feminicidas confesos están a punto de ser liberados porque la investigación judicial y fiscal estuvo llena de irregularidades, se vencieron los plazos de prisión preventiva y aún no hay sentencia en primera instancia.

Estamos hartas de jueces que condenan a las mujeres que denuncian públicamente a los presuntos autores de la violencia sexual o de género, sabiendo que no deben ser acusadas de difamación penal porque eso limita la erradicación de la violencia contra la mujer, como es el caso de nuestra compañera activista Marcela Poirier, quien ha sido estigmatizada y castigada.

Foto: Igor Alfaro Méndez

Rechazamos rotundamente los ataques de grupos fascistas que usan con fines políticos el terror y el hostigamiento contra defensoras y activistas de derechos humanos como fue el ataque contra las víctimas de esterilizaciones forzadas, integrantes de IDL, APRODEH, la Biblioteca Miguelina Acosta, lugares de memoria como El Ojo que Llora, entre otros, poniéndo en peligro la integridad de niñas, niños, adolescentes, mujeres jóvenes y adultas mayores.

Nos solidarizamos con Jenny y Darling, dos mujeres que luchan desde 2016 para ser reconocidas como madres de su hijo Dakarai, y que aún el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) se niega a inscribir a ambas como progenitoras en el Documento Nacional de Identidad (DNI) de Dakarai, violando sus derechos como ciudadanas, no reconociendo su comaternidad y vulnerando la identidad de un niño al no permitir que sus madres lo representen.

Las mujeres y diversidades estamos comprometidas con los derechos humanos de todas, todes y todos, hacemos un llamado a la unidad frente al conservadurismo porque los derechos y las leyes que hemos logrado con nuestras luchas, no pueden retroceder.



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